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Opinión
Mircea Cărtărescu sólo menciona a una mujer, y es para despreciarla
En su "magistral" discurso de la inauguración de la FLM, el eterno nominado al Nobel citó a una veintena de escritores esenciales para entender la Literatura Universal, pero también se le olvidó algo importante...
Homero, Dante, Rilke, Pynchon, Dostoievski, Kafka, Borges, García Márquez, Mann, Balzac, Nabokov, Tolstoi, Joyce, Proust, Góngora, Mallarmé, Flaubert, Salinger, Eliot, Valéry, Ungaretti, Stanescu, Wittgenstein, Baudrillard, Rabelais, Swift, Sthendal.
Mircea Cărtărescu, el gran escritor rumano, los mencionó en su texto de inauguración de la Feria del Libro de Madrid el pasado fin de semana. (Se puede leer aquí).
El discurso, calificado por muchos como emotivo por desentrañar las pasiones y el amor por la lectura de un hombre que también nos encandiló a todos con novelas brillantes como lo es Nostalgia, está plagado de frases hermosas sobre lo que significa ser lector desde la infancia, y sobre el arduo pero bonito oficio de escribir.
Emotivo, sí.
Un discurso emotivo.
Un discurso muy emotivo que está lleno de referentes universales, pero en el que ¡ay! por desgracia no aparece ni una sola escritora.
Ni una.
O bueno, sí: una cuyo nombre no está escrito con todas sus letras, sino que es sugerido a través de su personaje más célebre —también masculino, el de Harry Potter — para ser a continuación tachada de mediocre y comparada con un electrodoméstico.
A Mircea Cărtărescu no le gusta J.K. Rowling, y eso es algo que podríamos aceptar porque no a todo el mundo le tiene que gustar la reina de la literatura fantástica. Pero es que según su emotivo texto de inauguración de nuestra feria más importante —dedicada este año a las mujeres olvidadas, silenciadas y despreciadas de la literatura, por cierto— a Mircea Cărtărescu tampoco le gustarían, qué se yo, Virginia Woolf, Sor Juana Inés de la Cruz o Zadie Smith —por citar a algunas figuras ampliamente reconocidas en la Literatura Universal como lo son la veintena de apellidos que sí incluyó en su texto.
Mircea Cărtărescu: nos flipas mucho. Te leemos mucho. Te queremos mucho. Pero haznos el favor. Tú que dices sabiamente que la literatura nos ayuda a ser personas “más verdaderas”, aléjate de la “utopía” de un canon sexista, y acuérdate de la verdad del mundo. De la gran verdad de la literatura. De la profunda verdad de nuestro tiempo: sin las escritoras, tampoco existimos.
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