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El vídeo resulta de verdad inquietante... si antes no te entra la risa
Playground community
06 Junio 2018 22:30
El demonio puede adoptar formas insólitas y encarnarse incluso en aquellos objetos que, a priori, parecen inofensivos. Por suerte, esta congregación de exorcistas de andar por casa permanece ojo avizor y está dispuesta a hacer “lo que hay que hacer” para que sus esbirros de peluche —los esbirros del diablo, insistimos, por si no quedase claro— no nos arrebaten el alma.
Además, en su empeño moralizador nos advierten del peligro de poseer muñecos, dejando constancia de su postura hacia a ellos en este vídeo tan raro, que bien podría calificarse como un genocidio ritual de peluches embrujados.
Todo sucedió tras recibir una señal de su poder diabólico. Según explica el hombre que aparece en la grabación, una "hermana" de culto tuvo una "revelación" durante un sueño en el que un peluche "la tenía por el pelo y la estaba ahogando”. Fue entonces cuando “la voz de Dios" le susurró que "no era bendecido tenerlos".
Por su parte, la iluminada afirma que "un demonio entró" en uno de los personajes de felpa y que el miedo la paralizó. "El Señor me mostró que los muñecos son un canal que los demonios usan", concluye. Piel de gallina.
Consciente de la extravagancia del ritual, el exorcista vuelve a intervenir para tratar de aclarar un poco las cosas: “Posiblemente, quienes vean el vídeo dirán… esta gente está loca (...) Pero más loco está quién gasta dinero en esto".
Hombre rompiendo peluches
El vídeo, que fue publicado en la cuenta de Francheska Roque, ha sido visto por varias decenas de miles de personas y ha motivado numerosas críticas. Tantas que la propia Francheska ha salido al paso de quienes les señalan con las siguientes palabras:
“El hecho de que tanta gente se enoje a causa del vídeo de los muñecos, solo comprueba lo enojado que está el diablo y eso es muy bueno... El hecho de que satanistas, ateos y probablemente impíos sean la mayoría de las personas que hacen comentarios ofensivos, no me molesta en lo absoluto…”
Sin entrar a juzgar a esta pandilla, sí es de justicia señalar que esta no es, ni de lejos, la primera vez que alguien tiene problemas con un “muñeco diabólico”. Que se lo digan a la protagonista real de la historia que inspiró la película Annabelle.
Para los que no hayáis visto el film, Annabelle es una muñeca de porcelana poseída y con muy mala leche. En la realidad la muñeca no es tan siniestra como la pinta el film, pero según Donna, su propietaria, y otros testigos presenciales, sí que mostraba síntomas de estar poseída.
Comenzando por el principio, Annabelle era una muñeca de trapo “Raggedy Ann” que acabó en las manos de Donna cuando su madre se la regaló antes de irse a la escuela de enfermería, allá por 1970.
Los fenómenos extraños comenzaron poco después, cuando Donna se mudó a un apartamento para estar más cerca de la facultad y llevó consigo a Annabelle. Por lo visto, tanto ella como su compañera empezaron a percibir que la muñeca cambiaba sola de postura y que otros objetos de la casa aparecían en lugares extraños, algo que puso en alerta a las dos jóvenes. Sin embargo, la gota que colmó el vaso fue la aparición de unas notas anónimas que rezaban: “Ayúdanos”.
Finalmente, las inquilinas decidieron llamar a una médium para que estudiara el asunto. Según la especialista, la muñeca estaba poseída por el espíritu de una niña de 7 años llamada Annabelle Higgins que había fallecido en esa misma casa.
Muñeca Annabelle
Sin saber muy bien qué hacer, Donna se encomendó al matrimonio formado por Ed y Lorraine Warren para que le quitaran de encima a la molesta presencia. La famosa pareja de cazafantasmas le aseguró que no se trataba de un espíritu, sino de un diablo y pidieron al padre Cooke que llevara a cabo un exorcismo para limpiar la casa. Después se llevaron la muñeca por precaución y hoy en día puede contemplarse en el Museo de lo Oculto de los Warren, en Connecticut.
¿Fue el caso de Annabelle el primer aviso de que a los muñecos los carga el diablo? ¿Hay alguna conexión entre este fenómeno y el de los peluches encantados? Y sí es así ¿se puede exorcizar el fieltro? Probablemente, nunca lo sabremos...
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