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Culture
Durante el rodaje de su primera película 'Bully', Bijou Phillips le insultó por su orientación sexual, por su cuerpo, y llegó a agredirle físicamente
13 Noviembre 2017 17:47
Después de que la actriz Ellen Page se atreviese recientemente a explicar la homofobia y el acoso que recibió por parte del director Brett Ratner durante el rodaje de X-Men, el actor Daniel Franzese — conocido principalmente por su papel de Damian en Chicas Malas — ha decidido explicar en un post de Facebook la historia de abuso a la que fue sometido por una compañera mientras rodaba su primera película en el año 2001.
“Voy a contar esta historia de homofobia y abuso porque Ellen Page compartió la suya”, escribió. “En mi primera película Bully fui acosado por Bijou Phillips durante todo el rodaje. Se metió con mi cuerpo y me ridiculizó por mi sexualidad y me asaltó físicamente. Estaba asustado y sin salir del armario porque temía por mi trabajo”.
Según explica en su declaración, todo empezó el primer día con miradas desagradables constantes y escaló rápidamente a la agresión verbal. “Mientras estábamos grabando ella no paraba de decir en voz alta, ‘¿Eres gay?’ y riéndose mientras los productores y el director de foto no hacían nada para pararla”.
Por suerte, Franzese sí sintió el apoyo por parte de otros actores, “Algunos de los miembros del reparto como Michael Pitt y Brad Renfro no paraba decirle que se callara, pero ella continuó diciendo ‘¿Eres gay?’ otras 10 veces asegurándose de que era suficientemente alto como para que todo el mundo lo escuchara”. Para protegerse, Franzese no sentía que tuviera más alternativa que decir que era bisexual.
Habiendo sido adolescentes, es fácil imaginar la tortura psicológica a la que se vio sometido Daniel al sentir como Bijou se reía en público de su cuerpo. “Tenía una escena en la que mi personaje tenía que quitarse la camisa. Estaba en un momento extremadamente vulnerable porque no era en asboluto el tipo de tío que se sentía a gusto quitándose la ropa frente a alguien en ese punto de mi vida. Era el chico rellenito que llevaba camiseta en la piscina. Así que me quité la camisa para la escena y ella empieza a partirse y a señalarme gritando a pleno pulmón ‘¡Uhhhh, qué asco!’”.
El momento fue tan horrible que incluso a uno de sus compañeros se le saltaron las lágrimas. “El fallecido Brad Renfro empezó a llorar y me siguió fuera del set de rodaje, cogió mi cara y me besó. Me dijo que era guapo y un gran actor y demás, y le quiero y le respeto muchísimo por ese momento”, explicó.
En cierto momento, los comentarios horribles de Phillips pasaron a la agresión física: le retorcía los pezones y, en una ocasión, “me golpeó tan fuerte como pudo en la parte de atrás de la cabeza". Franzese cuenta también cómo los abusos de Phillips afectaron también a otros miembros del rodaje, como las encargadas de vestuario.
El maltrato al que Phillips le sometió durante aquel rodaje afectó a su vida y su carrera, “fue una bendición poder meter un pie dentro de Hollywood... pero fui recibido con homofobia, insultos a mi cuerpo y abuso. El modo en el que me trataron en ese ambiente hostil de trabajo me produjeron unos traumas que me hicieron no salir del armario durante mucho tiempo”.
A diferencia de las historias que hemos escuchado recientemente por parte de muchas de sus compañeras de profesión, Franzese no ha estado en absoluto escondiendo esta historia hasta ahora: simplemente, nadie ha estado interesado en contarla. “He explicado esta historia a revistas, series de televisión y entrevistas, pero parece que siempre lo han cortado del artículo o nunca nadie ha querido escucharlo”.
Con lo que respecta a Phillips, Franzese no cree que le preocupe mucho que nada de esto se hable, "no me puedo imaginar que a alguien que se comporta de esa manera le importe que luego se cuenten historias sobre ellos".
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