Crece la tensión entre EEUU e Irán por el acuerdo nuclear. El presidente iraní, Hasan Rohaní, ha amenazado a EEUU si este se retira del pacto nuclear firmado por Irán y otras tres potencias en 2015. "Si EEUU se retira del JCPOA muy pronto tendrá un arrepentimiento histórico", aseguró el mandatario persa en un discurso. El presidente de EEUU, Donald Trump, ha reiterado desde su presidencia la intención de romper el acuerdo si no se imponen más sanciones al país. La situación es especialmente delicada porque debe pronunciarse sobre si continúa con el pacto el próximo 12 de mayo.
Nuevo atentado en Afganistán. Al menos 13 personas han fallecido víctimas de un atentado terrorista registrado en una oficina electoral en la provincia de Khost. Otras 30 estarían heridas, según la información facilitada por las autoridades. El ataque se habría producido por una detonación de explosivos al interior de una mezquita cuyo uso era el de oficina electoral de cara a los próximos comicios de octubre. El atentado ha tenido lugar apenas seis días después de que un doble ataque terminase con la vida de 25 personas en Kabul, entre ellas 9 periodistas. El pasado mes, otras 60 personas fallecieron por un atentado en la misma provincia, atribuido a Estado Islámico. Nadie ha reivindicado todavía el nuevo ataque.
Detenidos 14 hombres en la India después de una violación grupal. La policía india ha detenido a 14 hombres como presuntos responsables de una violación grupal de una adolescente de 16 años, a la que después mataron y quemaron. Los hechos ocurrieron el pasado jueves en el estado de Jharkhand, cuando los familiares de la víctima se ausentaron para acudir a una boda. El grupo de hombres entonces la secuestró. A pesar de las detenciones, el principal sospechoso sigue a la fuga.
Corea del Norte acusa a EEUU de boicotear los avances para la paz. El régimen de Kim Jong Un ha señalado directamente a la administración Trump por entorpecer el clima de diálogo y reconciliación que se ha mantenido en las últimas semanas entre las dos Coreas. Corea del Norte ha asegurado que sus intenciones para la paz no pueden ser interpretadas como un signo de debilidad y ha apuntado que no ha sido la dura política estadounidense que ha hecho ceder a Corea del Norte, sino exclusivamente la voluntad pacífica del régimen por llegar a una resolución del conflicto. El cruce de declaraciones se produce días antes de la histórica cumbre que Kim Jong Un celebrará con Donald Trump para dar el pistoletazo de salida a lo que podría ser el fin del conflicto entre las dos Coreas.