Hasta las estrellas de Hollywood alucinan con la eterna juventud de Manu Ginóbili
Los San Antonio Spurs tienen como nuevo aficionado a toda una estrella de la gran pantalla. Aunque Brad Pitt nunca haya asistido a ningún partido de la franquicia en la ciudad texana y tampoco ha mostrado un cariño especial por el equipo públicamente, acaba de comprar por 40.000 dólares en una subasta una "experiencia exclusiva" con los Spurs.
Al parecer, el actor -que juega a baloncesto desde que era pequeño- quiere conocer a Manu Ginóbili. El argentino está dejando boquiabierto a medio mundo por su gran rendimiento a los 40 años, convirtiéndose en el "Benjamin Button" de la NBA.
La compra de la experiencia con "Manudona" se completó en una cena benéfica de la Organización de Ayuda Haitiana de Sean Penn. El coste del cubierto era de 15.000 dólares y tenía como bonus una subasta que incluía todo tipo de ofertas. Se ha filtrado que Brad Pitt fue superado en la subasta de una pintura por Arnold Schwarzenegger y que tampoco pudo quedarse con el otro paquete por el que ofertó: ver un capítulo de Game of Thrones con Emilia Clarke -Daenerys en la serie-. Puso 120.000 dólares encima de la mesa, pero fue vendido por 160.000.
Analizándolo con perspectiva, es lógico que Pitt quiera conocer a Ginóbili. Lo que está haciendo no se había visto nunca antes en la liga.
En sus 2 últimos partidos ha anotado 21 y 26 puntos respectivamente, convertiéndose en el el primer jugador de 40 años o más que mete más de 20 puntos en dos partidos consecutivos desde Michael Jordan en la campaña 2002-03. Solo el propio Jordan y Kareem Abdul-Jabbar habían conseguido 26 puntos en un partido a los 40 años o más en la NBA.
Gracias a sus actuaciones, se ha ganado el apoyo de los twitteros. Si de esta red social dependiera, Ginóbili sería titular en el próximo All Star de Los Ángeles, ya que tiene 4 veces más votos que Lebron James y casi tres más que Stephen Curry.
"Sinceramente creo que Manu merece ir al All Star, hacer todo lo que hace teniendo 40 años es de locos", ha dicho recientemente Lebron James en una zona mixta. "Aparte, es calvo como yo, como para no quererlo. Y ni hablemos de esa nariz sensual que tiene. Votadlo...".
De momento, Ginóbili va quinto en las votaciones generales de "guards", aunque habrá que esperar hasta el 15 de enero para saber si ocupará una plaza en el quinteto titular.
Tal es su hazaña que en San Antonio se ha extendido la broma de que Manu bebe "zumo del abuelo" -"grandpa juice"- y que por esa razón tiene tanta vitalidad.
Su entrenador, Gregg Popovich, declaró tras el partido en el que anotó 26 puntos ante Portland que "quiere un poco de lo que sea que esté tomando. En serio, tiene que haber una fuente de la juventud en algún lado".
Debe estar pensando cómo es posible que el segundo jugador más viejo de la liga -solo le supera Vince Carter por unos meses- haya ganado ya dos partidos esta temporada con dos canastas en los últimos segundos de partido.
Actualmente, Ginóbili no toma ningún zumo raro pero de joven sí tomaba un batido de hígado, huevo y banana para fortalecer su musculación.
Entonces, ¿cuál es su secreto para mantenerse pletórico físicamente?
Desde hace 8 años cuida su cuerpo con un método que se basa en la relación entre el estado visceral con el músculo esquelético a través de cadenas fisiológicas, conocido como Método Busquet.
El objetivo es eliminar el máximo de tensiones estructurales que son la base de las disfunciones en los deportistas, la mayoría de ocasiones a través de estiramientos. Esto se traduce en una mayor libertad de las cadenas musculares, dando más amplitud a sus articulaciones.
En otras palabras, Ginóbili se mantiene en forma siendo más flexible que los demás, lo que le permite aguantar a jugadores mucho más explosivos.
¿Le copiarán su estrategia?
