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Artículo Los malteses del 12-1 denuncian que les drogaron con limones Sports

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Los malteses del 12-1 denuncian que les drogaron con limones

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Estupefacción en España tras este documental en el que futbolistas malteses aseguran que "A los jugadores españoles les salía espuma blanca por la boca y eso lo provocan los esteroides"

Omar Naboulsi

20 Marzo 2018 13:49

El 21 de diciembre de 1983 es una de esas fechas que marcaron el devenir de la selección española. Fue un partido disputado en la noche sevillana, donde la España dirigida por Miguel Muñoz buscaba un milagro para estar en la Eurocopa'84 de Francia. Debía ganar a Malta por 11 goles de diferencia, de lo contrario quedaba eliminada y Holanda jugaría el torneo.

A pesar de la debilidad del rival, ganar por esa ventaja parecía casi imposible. Incluso para algunos de los propios protagonistas que jugaron el partido, que hablaban de la gesta pero con la boca pequeña. La afición tampoco creía en la remontada. En plena época navideña, la gente no llenó el Benito Villamarín. Tampoco ayudaba el hecho de que apenas un año antes, en 1982, la selección fracasara en el Mundial jugado en casa.

No empezó bien el partido, yendo al descanso ganando "solo" por 3-1. España tenía que marcar 9 goles en 45 minutos... y así lo hizo.

La narración de José Ángel de la Casa gritando fuera de sí "Gooooool de Señor!" -gallo incluido- es historia del periodismo deportivo español.

Pues bien, casi 35 años después de aquel partido, el programa "Fiebre Maldini" de Movistar + ha reunido a varios protagonistas de aquella noche. Entre ellos, los testimonios del seleccionador maltés Victor Scerri y tres de sus futbolistas: Carmel Busuttil, Emanuel Fabri y Silvio Demanuele.

Todos ellos aseguran que jugaron el partido drogados y que los españoles iban dopados.

Al parecer, sufrieron la hostilidad española desde que aterrizaron. El hotel que les había reservado la federación era malo y acabaron reservando uno por su cuenta.

"Llegamos con un día de retraso, nos quisieron hacer entrenar a las diez de la noche y el campo no tenía luz. Nos metieron en un hotel muy malo, que no tenía restaurante, así que para desayunar teníamos que vestirnos de calle para que no nos reconocieran y no nos increparan los seguidores españoles. No nos dejaron dormir del ruido que hacían", relata Fabri.

"Yo tengo un hermano que era culturista y sé lo que pasa cuando se toman esteroides", dice Demanuele, que aquella noche marcó el provisional 1-1. "La energía de los españoles era algo fuera de lo normal. Algunos tenían espuma en la boca, les salía un ácido líquido de la boca y no paraban de beber agua".

Sin embargo, la gran sospecha de los jugadores malteses estaba en una bandeja de limones que les ofrecieron en el descanso del partido, dentro de su propio vestuario. Así lo cuenta Scerri: "Entró un señor bajito vestido de blanco y nos ofreció una bandeja de limones, cortados. Era lo único que nos ofrecieron. Los jugadores los chuparon y después se sentían mal. Me preguntaron: '¿puede que les hayan drogado?' No teníamos pruebas, espero que España no hubiera hecho nada de eso. Si eso hubiera sucedido, el fútbol estaría totalmente terminado".

Demanuele confirma lo que dice su ex entrenador. "Cuando chupé esos limones, me sentía borracho, como si hubiera estado toda la noche de fiesta".

También tuvieron palabras en contra del árbitro, el turco Erkan Göksel. Según Fabri, era "muy, muy malo, el peor que he visto en mi vida. Iba en contra nuestra, España necesitaba una ayuda. A nosotros no nos consentía nada, a las divas, que eran los españoles, les permitía todo. Hubo momentos en los que nos decía, 'vamos, vamos, jueguen'. Como si nos metiera prisa".

Las reacciones desde el fútbol español no se han hecho esperar. José Antonio Camacho, el capitán de la selección española en el 12-1, asegura que las acusaciones de dopaje de los malteses demuestran "poca categoría". "Me parece una locura. Algo injustificado. Están compinchados para decir eso. Que entró un señor de blanco ofreciendo limones... pues no los cojáis", dijo en el propio programa donde habían hablado los malteses.

"Están demostrando que tienen muy poca categoría deportiva. Hemos pasado todo tipo de controles. Nunca hemos tomado nada. No sé que son los esteroides. Eso de la espuma me parece... Cuando se lo llega a una edad se dicen cosas que no se deben y se dice que se chochea, y eso es lo que están haciendo", denuncia Camacho.

El actual seleccionador, Julen Lopetegui, tampoco se mordió la lengua en su paso por los micrófonos de "El Partidazo" de la Cadena Cope.

"No le doy mucha credibilidad a todo lo que está saliendo en relación al España-Malta".

Por último, Poli Rincón también ha salido al paso. Se dice que en el descanso del partido se dedicó a convencer uno por uno a todos sus compañeros de que la remontada era posible. Él marcó 4 de los 12 goles de España.

"Tienen que ser más profesionales y después de tantos años, no pueden decir eso. Gente mayor, con canas, sobre todo el seleccionador... no pueden decir estas barbaridades porque lo que puede suceder es que luego se rían de gente mayor. Y eso me duele en el alma", dice Rincón.

"En el vídeo, cuando hablan, ellos mismos reconocen que tuvieron problemas para jugar ese partido, porque venían de jugar contra Holanda y tuvieron sólo tres días de descanso. Tuvieron que viajar en malas circunstancias, no quisieron hospedarse en el hotel que les había dado España y se fueron por su cuenta y riesgo a otro hotel... Entonces se dijo que no quisieron meterse en el hotel que les daba la Federación Española porque Holanda les había pagado para que no se dejaran meter 11 goles y no querían saber nada de nosotros".

Sea como sea, resulta extraño que uno jugadores que fueron señalados como la gran vergüenza nacional hayan esperado 35 años en denunciar que les habían drogado... ¿no hubiera sido una buena defensa en aquel momento?

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