La FIFA se cree que Paolo Guerrero tomó cocaína por culpa de una taza sucia y le dejará jugar el Mundial
La Comisión de Apelación de la FIFA ha reducido la sanción impuesta al Paolo Guerrero por dopaje. La máxima figura del fútbol peruano iba a estar 1 año sin jugar partidos oficiales, pero el organismo le ha rebajado la suspensión a 6 meses, así que podrá estar en el Mundial de Rusia'18.
Como adelantó el abogado del jugador, Pedro Fida, antes de que la Comisión publicara el comunicado oficial, la organización "aceptó parcialmente el recurso interpuesto".
Perú lo celebra.
"La decisión adoptada por la Comisión Disciplinaria de la FIFA el 7 de diciembre de 2017, por medio de la cual el jugador fue suspendido por un periodo de un año, fue parcialmente desestimada y el periodo de suspensión de un año fue reducido a seis meses", explica el organismo.
"Tras analizar todas las circunstancias específicas del caso, en particular el grado de culpabilidad del jugador, consideró que un periodo de inelegibilidad de seis meses es una sanción proporcionada".
En otras palabras, la FIFA cree que la versión que explica Paolo Guerrero sobre su inocencia es cierta. Tal y como te contamos aquí, el delantero asegura que dio positivo por el metabolito benzoilecgonina -un estimulante prohibido por la Agencia Mundial Antidopaje- por culpa de una taza de té que no lavó y en la que se había consumido cocaína.
Viendo que tiene a la Comisión de su lado, el abogado ha olido sangre y pedirá una rebaja mayor, ya que Guerrero lleva sin jugar desde el 3 de noviembre.
"La FIFA descartó expresamente el consumo de cocaína o de cualquier droga social por Paolo Guerrero", se vanagloria Frida en RPP Noticias. "Estamos muy conscientes de que el caso del jugador Guerrero nos permite conseguir una absolución en una tercera instancia".
Es más, el siguiente paso que van a dar es presentarse ante el Triunal de Arbitraje Deportivo -TAS- para que dictamine que es inocente.
A sus 33 años, Guerrero puede darse un canto en los dientes por poder jugar el Mundial, ya que otros futbolistas que dieron positivo juraron y perjuraron que no lo hicieron voluntariamente y no fueron salvados por la FIFA.
Sea como sea, Perú jugará finalmente un Mundial 36 años después con su gran capitán a la cabeza.
