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¿Crees en los milagros o en la suerte? Viendo estas imágenes se hace necesario optar por una de esas cosas. Solo acudiendo a esos asideros puede explicarse esta escena registrada hace pocos días en una carretera cercana a Bangalore, en India. Primero, por lo contraria a la lógica que parece la idea de que una moto en pleno acelerón choque contra otra que se encuentra parada en el arcén, salgan volando el conductor y su acompañante, y siga la moto su trayecto como si nada tras la colisión. Luego, porque la lógica invita a pensar que una niña de 5 años abandonada a su suerte a lomos de una moto como esa...
La cosa apuntaba a tragedia. Pero no.
Instante tras la colisión, cuando la madre cae y la niña sigue en la moto hacia delante
Tras el choque, la hija de la pareja que cae sobre el asfalto, de tan solo cinco años, permanece abrazada al tanque de combustible y la moto continúa circulando bien erguida, como si nada hubiese pasado. Ahí llegó el momento de pánico para los conductores que contemplaron la escena. ¿Cómo se detendría el vehículo sin nadie que lo manejase? ¿Acabaría la cosa en choque, en caída?
Al final, la suerte. Después de recorrer unos 250 metros, de cruzar dos carriles y casi toparse con la parte trasera de un camión, la moto pierde su equilibrio y se escora. La pequeña cae sobre unos arbustos situados en la margan derecha de la calzada. Se puede comprobar que la caída no es violenta. La niña solo sufrió unos simples rasguños.
Tampoco sus padres registraron importantes lesiones, a pesar de lo aparatoso que fue su accidente. Eso sí, la persona que conducía la moto tendrá que enfrentarse a varios cargos relacionados con su conducción temeraria.
Rodar a esa velocidad, de esa manera, con tres personas en la moto (una de ellas, menor de edad), todos sin casco... Demasiadas cosas mal.
