Oh! Parece ser que estás usando adblocker y lo respetamos. Por eso podrás seguir disfrutando de nuestros contenidos sin problema pero quisiéramos pedirte que lo desactivaras para nuestro site. Ayúdanos a seguir adelante y a luchar por aquello en lo que creemos.
Content
¿Peligrarán también nuestros trabajos?
Playground community
09 Marzo 2018 18:39
Se llama Flippy y quiere alimentarte. Y sí, Flippy es un robot, un brazo mecánico diseñado para cocinar hamburguesas.
Flyppy no es Terminator, no va a intentar acabar con la vida de nadie, pero sí representa una amenaza para el humano: los robots quitarán el trabajo a 800 millones de personas en el 2030, según un reciente estudio de estudio del McKinsey Global Institute, que cuenta con la participación de expertos del Departamento de Economía de Oxford y el Banco Mundial.
Y lo que es peor: de esos 800 millones de personas, el estudio prevé que cerca del 14% no encontrará nuevos trabajos.
Basta ver el vídeo de arriba para entender que la amenaza de la creciente robotización afecta a sectores que hasta hace poco considerábamos seguros.
El robot de cocina Flippy es capaz de realizar 300 hamburguesas a la hora sin despeinarse. ¿Cómo negarle a semejante maravilla su potencial?
Es imposible. Este brazo robotizado compuesto de 6 ejes, cámaras 3D y hasta sensores de todo tipo, creado por la empresa de robótica Miso Robotics, dispone de todo lo necesario para trabajar frente a la plancha. Hasta el punto que sus chips de Inteligencia Artificial le permiten aprender e ir mejorando la calidad de sus hamburguesas con el tiempo. Puede diferenciar cuando usar la espátula de carne cruda y cuando la de carne ya hecha. Cuando cambiar por el raspador y cuando limpiar la parrilla.
El robot de los 60.000 dólares ha pasado las pruebas de manera tan sobresaliente que la cadena Cali Burger ya ha incluido a Flippy en su plantilla del establecimiento de Pasadena en California y ha encargado otros 50 para el resto de sus restaurantes. Suficente para disparar la cotización de esta empresa de robótica.
El debate sigue abierto. La revolución de los robots nos dará más bienestar y menos trabajo, dicen unos. Nos van a mandar a todos al paro, dicen otros. Mientras, prohombres del mundo tecnológico como Bill Gates lanzan ideas como que los robots paguen impuestos. Porque, ¿quién pagará los impuestos cuando los robots y las computadoras estén haciendo todo el trabajo?
En mayo de 2016, una moción propuesta por el Parlamento Europeo sugirió que los robots pronto podrían clasificarse como "personas electrónicas", de manera que sus propietarios estarían obligados a pagar impuestos en su nombre. En febrero del año pasado el Parlamento de la UE rechazó esa moción a favor del ‘impuesto robot’ en febrero pasado, pero muchos expertos siguen a favor de la idea.
share