"Señor Presidente: ¡libere a las gallinas!"

Ayer se publicó en el periódico francés Libération una carta dirigida a Emmanuel Macron. En ella se pedía al presidente de Francia que cumpliera con las promesas anunciadas durante la campaña electoral respecto a los derechos de los animales. Concretamente, le recordaron que se había comprometido a prohibir la venta de huevos que provengan de gallinas criadas en batería para 2022.

Pero hay algo más que el presidente Macron puede hacer por las gallinas.

Así lo piensan los activistas, entre los que se cuentan nombres de una gran variedad de profesiones: carniceros, juristas, cantantes, humoristas, filósofos, estilistas, neurocientíficos, periodistas.

Esto es lo que le pidieron a Macron para este 2018:

“Su proyecto de prohibir la venta de los huevos de gallinas criadas en batería tiene un buen propósito, pero estamos convencidos que para conseguirlo, hay que hacer salir de las jaulas a todas las gallinas”.

“Es una buena medida, lógica y necesaria: sin ella, los huevos de bateria se continuarán vendiendo a los consumidores dentro de los productos de consumo corriente, como los pasteles, las galletas o los platos preparados. Y todo ello sin que lo sepan, ya que la etiqueta no informa al consumidor cómo se crían los huevos que contienen esos productos”

De esta manera pedían al presidente de la república francesa que fuera un poco más lejos y le planteaban el contexto actual, en el que escándalos sanitario tras escándalo sanitario y junto con la conciencia sobre el bienestar animal, ya nadie quiere consumir huevos de gallinas que hayan sufrido toda su vida. En Francia, un 90% de los encuestados se declaran a favor de que este sistema de crianza desaparezca por ser cruel.

"Es tu deber, señor presidente de la República, de proseguir en esta dinámica, tomando las medidas necesarias para que la prohibición de la cría en jaulas de las gallinas ponedoras sea introducida en la ley que se llevará ante el Parlamento durante el primer semestre de 2018", sentenciaban.