Un esquiador autopropulsado por un motor de hélice recorre las calles de Lérida

El siguiente vídeo hará seguro las delicias de aquellas personas que no ven el momento de enfundarse los esquís y comenzar a deslizarse montaña abajo. Bueno, también puede generar una envidia incontrolable a otros. Qué le vamos a hacer.

Como sabemos, la península ibérica lleva varios días siendo azotada por una poderosa borrasca, que parece no tener fin ni querer despedirse de nuestras bellas tierras. Y como siempre en estos casos, no llueve a gusto de todos, y nunca mejor dicho. Lo que para muchos turistas son unas vacaciones pasadas por agua, para los agricultores, que sufren uno de los peores años que se recuerdan por la sequía, es agua bendita que cae del cielo. Entre unos y otros, también hay quien aprovecha la nieve caída para sacar a pasear su invento por las calles de su ciudad.

Su invento, decimos, porque el sistema que ves a la espalda de nuestro protagonista es puro do it yourself.

Este inventor y emprendedor catalán se dejó ver esquiando el pasado viernes por las calles de Lérida siendo propulsado por un potente motor de hélice que llevaba colocada a la espalda. El principio es el mismo que con el paramotor, solo que en vez de surcar los aires con un parapente se trata de desplazarse por la ciudad sobre un par de esquíes atemorizando a ancianas.

A juzgar por las imágenes no se puede decir que sea silencioso, pero sí muy efectivo. Vemos a este chico moverse con una felicidad absoluta, cuesta arriba y cuesta abajo, al ver que su invento funciona a las mil maravillas.

Suerte, eso sí, que no se le cruzó ningún coche de repente.

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