¡Estos ingenieros japoneses han creado un Transformer de verdad!

Todo comenzó con unos juguetes cuya historia se convertiría poco a poco en un filón de oro. Originarias del planeta Cybertron, dos razas robóticas (Autobots y Decepticons) tienen la capacidad de cambiar de forma y transformarse en, por ejemplo, vehículos. ¿Te suena?

Los Tranformers eran originariamente juguetes japoneses de la compañía Takara Tomy, que en los años 80 pasaron a formar parte de Hasbro, compañía estadounidense que los lanzó al estrellato internacional. Al poco tiempo Marvel lanzó The Transformers, una colección de cómic que terminaría adaptada como serie de animación, dando paso a la creación del Universo Transformers.

Desde entonces la maquinaria no ha cesado: más líneas de juguetes, más cómics, más series de animación, más secuelas e incluso el paso a la gran pantalla en 2007.

Convoy vs. Megatron (1985) por Tranformers Wiki

Aunque el Universo Transformer se ha popularizado a nivel global, lo cierto es que su popularidad es extrema en su país de origen, Japón. No es de extrañar, pues, que unos ambiciosos ingenieros japoneses hayan decidido convertir los primogénitos juguetitos en robots a tamaño real. Y no estamos hablando de coches a los que les salen alas o cuyas ruedas se alargan, como los que aparecen en este vídeo. Estamos hablando de un robot transformer que no sólo cambia de forma, sino que ¡también se puede conducir!

El equipo de Brave Robotics ha hecho honor a su nombre (robótica valiente) al crear este robot-coche de 4 metros de altura en colaboración con Asratec, Sansei Technologies y otras compañías. Han tardado tres años en fabricar lo que ellos consideran el primer intento de crear un robot humanoide transformable a gran escala. Bautizado como J-dite RIDE, este robot puede ser controlado manualmente o por control remoto y tarda 1 minuto en cambiar de forma.

Como se puede observar en el vídeo que encabeza este artículo, dos miembros del equipo se montan en el coche equipados con cascos (seguridad ante todo). En pocos segundos el coche se convierte en un Transformer diseñado por el legendario diseñador mecánico Kunio Okawara, responsable de la mecánica de varios robots míticos en la industria de la animación japonesa. A continuación J-dite RIDE lanza destellos mientras vuelve a su forma automovilística.

Según Kenji Ishida, director ejecutivo de Brave Robotics, una de las partes de ingería más complicada fue conseguir un motor que funcionase correctamente para ambas formas (robot & vehículo). El equipo tuvo que crear las piezas y ensamblarlas desde cero.

Y precisamente por eso el único punto débil del J-dite RIDE es su velocidad. Actualmente la conducción del vehículo no supera los 60 km por hora, mientras que el robot se desplaza sobre ruedas a una velocidad máxima de 30 km por hora. Además, J-dite RIDE puede andar, dar pasos, pero le cuesta una hora recorrer poco más de 100 metros.

Los ingenieros no se dan por vencidos: “Nuestro plan es otorgarle a este robot la capacidad de un supercoche”, comentó Ishida. “Si el J-dite pudiese alcanzar el rendimiento de un Tesla, sería fantástico”.

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